Producciones en el CUD: ¿Qué es lo Real?

En el Taller de Filosofía, para comenzar a discutir sobre distintas concepciones filosóficas sobre qué es lo real y como se constituye lo que se considera la realidad, le hemos pedido a cada compañero que en unos pocos renglones nos digan qué piensan ellos. Así, salieron estas breves reflexiones, que ahora compartimos.

La realidad es aquello que surge a cada instante, que sucede infinitamente en cada momento. Lo que el sentido común cree que es real. Lo superficial de lo que hay tantas formas de sí misma y que cada persona enfrenta a su manera.

Claudio L

                                                                                                                                                                                          

Lo real es aquello que nosotros como hombres y mujeres consideramos que es parte de nuestra vida y que nos condiciona. Lo real es aquello que sentimos y percibimos todos los días, pero que también nos lleva a reflexionar y profundizar sobre ello. Es aquel medio que nos permite relacionarnos con los otros. A su vez lo real es siempre resultado de una multiplicidad de determinaciones y miradas distintas.

                                                                                                                                                                                           

Para mí la realidad es algo que construimos socialmente, en donde juegan los objetos materiales pero también las formas con las que percibimos.

                                                                                                                                                                                           

Lo real es todo lo que existe para la especia humana. Es lo que nos rodea y es también lo que no vemos en un contexto inmediato pero sabemos que está allí. Uno de los problemas es que accedemos a lo real a través de interpretaciones.

                                                                                                                                                                                           

La realidad es un concepto que pretende mayor entidad para un fragmento o recorte de la existencia.    

                                                                                                                                                                                           

Para mí la realidad es lo que vivimos día a día, las cosas que hacemos y son una realidad personal. Y así cada uno, entre todos una realidad global, cómo vive cada persona y cómo viven los grupos de personas.

                                                                                                                                                                                          

Lo real es lo que vivo más allá de que influya el pasado y tenga mucho que ver.  

                                                                                                                                                                                          

Todo lo que conocemos y pensamos (que existe) que le ponemos nombre o lo relacionamos a una idea.

                                                                                                                                                                                          

Lo real sería lo empírico, según algunos pensadores, es decir a través de la apariencia de las teorías de las cosas tangibles, se comprueba lo real. Pero siguiendo el orden de los pensadores hay algunos que dicen que no siempre es así, que hay probabilidades de pasen cosas fuera de mi. Para mí lo real son los sentimientos que llevamos dentro: el amor, el cariño entre las personas, la amistad, el dolor, el rencor. Pero sobre todo el más importante es el amor. 

"NOSOTROS TAMBIÉN TENEMOS ALGO PARA DECIR"

Respuesta de los estudiantes no agrupados y de La Juntada en el CUD ante las discusiones mediáticas sobre el Sistema Penitenciario Federal.

Como muchos se habrán enterado en estos días viendo la televisión o los diarios, se ha estado hablando bastante sobre los derechos de aquellas personas privadas de su libertad. Lamentablemente, no por un genuino interés en que haya un Sistema Penitenciario Federal que deje de lado efectivamente muchas de las herencias que arrastra desde la dictadura sino a partir de un hecho fundamentalmente mediático.

Como estudiantes de nuestra facultad que hemos estado participando a lo largo del último año de visitas, talleres y actividades en el Centro Universitario Devoto (CUD), pensamos que tenemos algo para decir al respecto. Consideramos que hay que responder al discurso, tan reproducido en estos días, que pretende señalar “que en las cárceles se entra por una puerta y se sale por la otra” o que los que están privados de su libertad no tienen por qué acceder a derechos como las salidas a actividades culturales, por ejemplo. Este discurso busca fijar en el imaginario social que estamos en una situación de inseguridad permanente para instalar salidas políticas absolutamente excluyentes. Estos sectores son presos de su propio discurso al olvidar que la solución al problema de la “seguridad” no pasa por excluir más a los ya excluidos sino por tratar de crear las condiciones para que puedan desarrollarse plenamente como personas.

Así como también queremos señalar que la realidad de la población carcelaria es muy distinta a las cifras que se han difundido. Que las torturas, las muertes y las violaciones a los derechos humanos continúan siendo responsabilidad de un Servicio Penitenciario Federal (SPF) heredero de prácticas nefastas que son necesarias erradicar de raíz. Hoy en día es una mínima proporción de la población carcelaria la que accede al derecho al estudio y al trabajo. Lamentablemente hemos tenido ejemplos en estos años donde la principal traba para que el trabajo y la educación, como herramientas de reinserción social, lleguen a las cárceles ha sido el mismo SPF. Basta como una muestra el ataque que ha sufrido el Centro Universitario Devoto en el año 2010.

Estamos seguros que muchos de los que han opinado durante estos días sobre la situación de las cárceles en nuestro país, pocas veces han pisado una de ellas, pocas veces han tratado de comprender sus complejidades y problemáticas. Tampoco es que creemos en soluciones ya cerradas y acabadas, sino que esta salida tendrá que surgir a partir de la discusión en las mismas unidades carcelarias. Discusiones como, por ejemplo, las que encaran los compañeros estudiantes del CUD proponiendo una nueva ley del Sistema Penitenciario que termine con su militarización.

Mientras tanto, nosotros pretendemos aportar nuestro pequeño grano de arena, esforzándonos y pensando cómo mantener con vida espacios como el CUD. Buscando cómo hacer que nuestros talleres y actividades nos sirvan a nosotros para aprender sobre esa realidad para nada simple, como también a los internos para poder escapar a la violencia cotidiana en la que están constantemente inmersos.